La teoría es similar a la de los artemieros comerciales sin aireador. Los nauplios nadan siguiendo la luz. Para ello hay varias separaciones de pvc espumado negro, que impiden que los huevos sin eclosionar que se van al fondo y las cáscaras que flotan vayan hacia la última parte, que es la única que no está vinilada y deja pasar la luz. Echo poco a poco el contenido de la botella en la primera etapa, dentro de un tamiz para que no se esparzan, y luego poco a poco retiro el tamiz dejando su contenido en la primera etapa. Luego lo cubro con un tapa de cartón a medida que solo deja libre el lado sin vinilar, y al cabo de un rato tenemos a la mayoría de los nauplios de artemia en la última etapa, esperando a que los recoja cómodamente con una jeringa. Si hay bastante luz en la habitación podemos dejarlo así, si no una pequeña linterna ayuda a que todos vayan a esa zona.
Os dejo unas fotos del invento. Lo mejor de todo es lo cómodo que resulta y el coste del mismo. La silicona, el vinilo y el pvc espumado los tenía en casa, y los cristales de 4 mm ya cortados a medida me costaron solo 4 €.




Un saludo.